Escapada Navideña a la preciosa ciudad de Luxemburgo. Ciudad llamada igual que el país, uno de los mas pequeños del mundo. Una ciudad que por estas fecha se llena de auténtica magia, y que junto con sus numerosos mercadillos navideños, se disfraza de una ilusión especial, sin olvidarnos del llamado “mirador mas bonito de Europa”: Le Chemin de la Corniche.
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Llegaba la Navidad y empezábamos a buscar destino para hacer un pequeño viaje y disfrutar de estas fechas tan especiales. Queríamos una ciudad europea no muy cercana, y ya que es la segunda navidad de Eizan y va enterándose poquito a poco y disfrutando de las cosas, buscamos una ciudad con mercadillos y que viviera la Navidad de una forma especial.
Busca que te busca, nos decantamos por Luxemburgo, una ciudad preciosa, y que por lo que vimos en internet había una amplia oferta Navideña en estas fechas.
Salimos desde el Aeropuerto de Bilbao como de costumbre. Volábamos con Air France, y haciendo una pequeña escala llegamos a nuestro destino. Llegamos sobre las 17h y estaba ya anocheciendo casi, por suerte nuestro hotel estaba perfectamente conectado desde el aeropuerto con el autobús, así que tardamos muy poquito y todo muy cómodo en llegar.
El hotel era el Grand Hotel Cravat, (Puedes reservar desde aquí). y estaba perfectamente situado en pleno centro de Luxemburgo y justamente en su puerta se situaba uno de los mercadillos mas bonito de la ciudad dedicado a las atracciones para los mas pequeños junto con la enorme noria, icono de la ciudad en estas fechas.
Aquí podéis observar la primera vista que tuvimos nada mas llegar a la habitación… sin palabras…
Según las previsiones, se avecinaban días de bastante lluvia y como en ese momento parecía que el cielo no estaba muy cubierto, dejamos rápidamente las maletas y bajamos a este mismo mercadillo a disfrutar un poco y tomarnos un vino caliente, esa bebida tan típica de estas ciudades europeas por Navidad.
Era la hora de cenar, así que cambiamos de mercadillo, nos fuimos a la zona centro, aunque tenemos que decir que las distancias eran prácticamente andando. Todo muy bonito, muy iluminado y Navideño, nos encanto ya que era lo que estábamos buscando.
También por la zona encontramos un mercadillo de comida muy animado con música en directo, nos quedamos por allí cenando y tomando unas cervecitas.
Ya era algo tarde y estábamos cansados, nos fuimos al hotel, pero antes de dormir sacamos un ratito para hacer una foto navideña a Eizan con su precioso pijama Navideño en un bonito árbol que había en el hotel.. jejeje
Despertamos al día siguiente prontito y hoy lo emplearíamos para conocer y ver los puntos mas bellos de la ciudad. El tiempo estaba algo inestable, nubes, sol, incluso algo de lluvia, pero nos dio tregua para pasar la mañana disfrutando de la ciudad.
Desayunamos en el hotel, cogimos fuerza y pusimos rumbo al punto posiblemente mas bello y conocido de la ciudad, Chemin de la Corniche. Nuestro hotel estaba céntrico y muy cerquita de todo, nada mas salir, teníamos en frente la preciosa Catedral de la ciudad, la catedral de Notre Dame, pero como daban lluvia para mas tarde, preferimos dejarla para el día siguiente ya que la teníamos al lado, y disfrutarla con mas calma.
Justamente detrás de la catedral encontramos una plaza con mucho encanto, la Plaza Clairefontaine donde se levanta un monumento a la Gran Duquesa Charlotte.
De camino y prácticamente muy cerquita también, divisamos el Gran Palacio Ducal de Luxemburgo. Es la residencia oficial del Gran Duque de Luxemburgo, y donde realiza la mayoría de sus obligaciones como cabeza del Estado del Gran Ducado. Desde el 16 de junio al 29 de agosto abre sus puertas al turismo y se hacen visitas guiadas de unos 45 minutos.
A continuación encontramos una pequeña iglesia, aunque por fuera no llamaba mucho la atención, por dentro era realmente preciosa.
Y ahora sí, después de caminar apenas 15 minutos, llegamos al llamado balcón mas bonito de Europa: Chemin de la Corniche. Para nosotros es el punto mas bello de la ciudad, y uno de los sitios con las vistas mas bonitas que hemos presenciado.
Es un precioso paseo peatonal que bordea las murallas de la ciudad y que brinda unas maravillosas vistas del cañón del río Alzette y del histórico barrio Grund junto con la imponente Abadía Neumünster. Tenemos que decir que es realmente bello, a cada paso que das hay una foto de postal.
Recorrimos todo el mirador hasta las Casemates Bock, otro de los puntos turísticos mas importantes de la ciudad. Se tratan de unas antiguas galerías militares y túneles excavados en la roca de las fortificaciones. Aunque nos llevamos una sorpresa, estaban cerradas al publico. Supongo que seria por ser festividad de Navidad o algo, pero no pudimos conocerlas.
Nuestra siguiente parada era bajar al Grund. Para ello existen unos ascensores que bajan y suben desde la parte alta de Luxemburgo hasta este magnífico barrio.
Cuando llegamos junto a los ascensores había una fachada con unos jarrones muy bonitos, nos llamo la atención….
Si desde arriba el Grund se ve precioso, una vez abajo lo es aún más, cada rincón es mágico. Nos recordó mucho al precioso barrio de Edimburgo, Dean Village. Aprovechamos a pasear y estar un poco mas tranquilos y relajados con Eizan.
Se nos hacia tarde y entraba el hambre, subimos de nuevo en el ascensor a la parte alta y comimos en un bar-restaurante que habíamos visto antes de bajar. Comimos unas excelentes hamburguesas con unas buenas cervezas, es local nos gustó mucho.
Como estuvimos muy agusto, no tuvimos prisa y comimos tranquilamente. Ya habíamos hecho el “turismo” de hoy, así que ahora le tocaba a Eizan. Pusimos rumbo al mercadillo que teníamos junto al hotel, el mercadillos de las atracciones para niños y la noria.
Y que decir, nos lo pasamos genial los tres, subimos en varias atracciones con Eizan y se nos caía la baba al ver como disfrutaba. Subimos hasta en la enorme noria con el miedo de como reaccionaría Eizan, pero viendo su cara, disfrutó casi mas que nosotros jejeje Nos lo pasamos genial.
Se nos pasó la tarde y cenamos en un restaurante de comida rápida que había alrededor. Estábamos ya cansados así que nos fuimos a dormir pronto.
Al día siguiente, el día amaneció completamente soleado. Después de desayunar fuimos a conocer la catedral que habíamos dejado pendiente el día anterior, un gran acierto ya que con el sol, lucia preciosa.
La Catedral de Santa María o Catedral de Nuestra Señora conocida como la Catedral de Notre Dame de Luxemburgo es la principal iglesia católica del País. Es uno de los mejores ejemplos de templos góticos con toques renacentistas que podemos encontrar en todo el continente, y además uno de los mejor conservado.
Muy cerquita tenemos la famosa plaza con una preciosas vistas.
Como aún teníamos mañana por delante, decidimos volver al mirador Chemin de la Corniche, pero esta vez en el otro extremo para tener otra visión.
Y nuevamente no defraudó, un paisaje increíble. Unas vistas espectaculares de la parte baja de Luxemburgo.
Hoy había amanecido el día completamente despejado, sin ninguna nube, pero eso sí, había mucho mucho frió. Esto nos invitó buscar un centro comercial. Cuando vamos con Eizan ,siempre solemos acabar en alguno, ya que también le da algo de libertad y suele haber cosas de entretenimiento.
Pusimos el maps en el móvil y con la ayuda de las indicaciones tomamos un autobús y en poco mas de media hora estábamos en un centro comercial enorme. La verdad fue un acierto, como he comentado había varios atractivos para los mas pequeños donde Eizan se lo paso genial.
Comimos y pasamos bastante tiempo en el, tomando algo y haciendo alguna compra. Después nos dirigimos de nuevo al centro de la ciudad, hoy era Noche Buena, prácticamente no encontramos nada para cenar, y cuando decimos nada es nada. No veíamos ningún sitio para cenar abierto, hasta que después de dar mil vueltas encontramos un Kebab, nos salvo la vida jajaja.
Eso si, lo bueno de esta noche es que apenas había nadie en la calle y pudimos disfrutar del centro de Luxemburgo con una calma super relajante y disfrutar de la noche e iluminación con todos los sentidos.
Y nada, nos fuimos a dormir, sin prisa porque al día siguiente el vuelo salia tarde, pero aquí acababa nuestra visita a esta preciosa ciudad Europea. Una ciudad que nos ha gustado porque los puntos turísticos están bastante cerca los unos de los otros, y con unos paseos, puedes hacerte un vistazo rápido de la ciudad. El mirador Chemin de la Corniche se ha ganado el “premio” al mejor mirador de Europa.